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2004

JFK Reloaded

El tiempo pasa, implacable, y algunos de nuestros lectores más jóvenes probablemente no sabrán quién fue John Fitzgerald Kennedy. Respuesta corta: un presidente de Estados Unidos al que, siguiendo una venerable tradición del país que se remonta a Abraham Lincoln, le volaron la cabeza de un tiro. Y ahora la respuesta larga... Kennedy gobernó Estados Unidos de enero de 1961 a noviembre de 1963, cuando fue asesinado. Visto sin apasionamiento, no puede decirse que destacara demasiado entre la clase de gente que suele ocupar la Casa Blanca; tampoco tuvo mucho tiempo de hacerlo, por otra parte. Pero emprendió el ridículo ataque contra Cuba en Bahía de Cochinos, jugó peligrosamente con la URSS durante la crisis de los misiles, y comenzó la intervención norteamericana a gran escala en Vietnam. A pesar de esto parece algo más tibio y razonable que su predecesor —Eisenhower—, y que muchos de sus sucesores. Ah, también era guapo y salía con muchas mujeres, cosa que contribuyó bastante a su popularidad y le convirtió en un filón inagotable para la prensa del corazón. Pero en fin, el hecho por el que este presidente estadounidense hoy es recordado y homenajeado fue la bala que le voló la tapa de los sesos. Suena cruel, pero es lo que hay.

Así que Kennedy fue asesinado el 22 de noviembre de 1963. Cuando participaba en un desfile en Dallas, sentado en un coche descubierto, fue alcanzado en la cabeza por uno de los disparos efectuados por Harvey Lee Oswald desde un edificio cercano. Como muchas veces ocurre cuando alguien famoso muere —véanse Elvis o Hitler—, con el tiempo han ido apareciendo teorías conspiratorias que achacan el asesinato a la CIA, los comunistas, los exiliados cubanos, el crimen organizado, los israelíes o incluso al sucesor de Kennedy, el presidente Lyndon B. Johnson. Precisamente una de las primeras cosas que hizo Johnson tras llegar a la presidencia fue organizar una investigación oficial sobre el crimen, que corrió a cargo de la llamada Comisión Warren, y cuyas conclusiones se hicieron públicas en septiembre de 1964. Por supuesto, esto no ha zanjado el asunto, y se sigue discutiendo de forma recurrente sobre quién y cómo mató a Kennedy.

Y esto nos lleva al videojuego del que hablaremos aquí: JFK Reloaded. Se publicó en noviembre de 2004, coincidiendo oportunamente con el aniversario del magnicidio. Desarrollado por una compañía escocesa llamada Traffic Games, pretende —según sus autores, no os riáis— demostrar la validez de los hallazgos de la Comisión Warren. Y el modo de hacerlo es el que ya suponéis; poner al jugador en el pellejo de Oswald, entregarle el rifle que él utilizó, situarlo en el escenario del crimen y hacer circular de forma tentadora la comitiva de Kennedy por delante de sus narices.

Bueno, no es tan sencillo. En teoría, de lo que trata JFK Reloaded es de replicar con precisión las conclusiones de la comisión. Ellos determinaron que Oswald efectuó tres disparos, de los cuales uno impactó en la calle sin alcanzar a nadie, y otro terminó hiriendo al gobernador Connally, que acompañaba a Kennedy; vosotros también tendréis que conseguir exactamente eso. Aunque en realidad el juego os da libertad para abrir fuego a vuestro aire y sobre quién os parezca —con resultados que pueden ser bastante caóticos—, la puntuación final depende de en qué medida os ajustéis a lo que se supone que hizo Oswald.

Los autores no escatimaron declaraciones pomposas sobre el juego. Según ellos, se trataba de la primera reconstrucción forense de participación masiva del mundo, un título educativo con el objetivo de establecer los hechos que con mayor probabilidad ocurrieron el 22 de noviembre de 1963. Como comprenderéis, muchos no quedaron convencidos de que tan altas intenciones fuesen ciertas, y la polémica que despertó JFK Reloaded fue considerable, especialmente en Estados Unidos. Como ninguna compañía se atrevió a distribuirlo, Traffic Games decidió prescindir de intermediarios y venderlo directamente desde su página en Internet. Y además, organizó una competición entre los jugadores, premiando con entre 10.000 y 100.000 dólares —el importe exacto del premio dependía del dinero que consiguiesen recaudar los autores con las ventas del juego— al que para febrero de 2005 hubiese logrado la máxima puntuación, cosa que, como ya he dicho, se consigue replicando punto por punto las conclusiones de la Comisión Warren; según JFKaos, hubo efectivamente un ganador. En verano de 2005, Traffic pasó a ofrecer su "simulación forense" de forma gratuita, y poco después cerraron su página web y desaparecieron de la faz de la Tierra, probablemente a causa de la controversia.

¿Y qué decir del juego en sí? Bueno, da lo que promete. Los gráficos son bonitos y realistas, y además los autores dedicaron grandes esfuerzos a simular las trayectorias y efectos de los disparos del jugador. De hecho, después de cada "partida" —que consiste en una escena, de un par de minutos de duración como máximo, en la que podréis tirotear a placer la caravana presidencial— aparece un divertido informe balístico que os explicará a dónde ha ido cada una de vuestras balas. También hay que decir que los personajes que toman parte en la acción reaccionan y se comportan de acuerdo a las circunstancias: por ejemplo, los coches generalmente aceleran cuando se abre fuego contra ellos, a veces de forma imprevisible, tratando de poner a salvo al presidente.

La verdad, JFK Reloaded se vuelve más divertido cuando olvidamos a la Comisión Warren y nos dedicamos con alegría al tiro al pato. Podéis considerar esto, imitando la grandilocuencia de los autores, "explorar escenarios históricos alternativos". ¿Qué hubiese podido pasar si Oswald hubiese asesinado primero al conductor de la limusina presidencial? ¿O si hubiera disparado diez veces en lugar de tres? Al final, el juego termina cogiendo un poquito del sabor anárquico del GTA, sólo que se trata de una dosis mucho más pequeña.

Está claro que, dijese lo que dijese Traffic Games, el aspecto más atractivo de este título es la satisfacción y el morbo de dispararle a todo un presidente de los Estados Unidos, y esto lo sabían perfectamente. Y no voy a negar que la cosa funciona. Eso sí, la novedad se agota rápido y seguramente os cansaréis pronto de JFK Reloaded.

REQUISITOS DEL SISTEMA

  • Procesador Pentium II o compatible a 400 MHz (recomendables 800 MHz, ideal una máquina a 2 GHz o mejor).
  • 128 MB de RAM (recomendables 512 MB).
  • 100 MB libres en el disco duro.
  • Tarjeta gráfica con aceleración 3D. Según los autores, el juego puede funcionar con algo tan limitado como una Nvidia TNT de 16 MB, pero recomiendan disponer como mínimo de tarjetas de 64 MB —una Nvidia GeForce 3, por ejemplo—, y aseguran que lo ideal serían piezas mucho más potentes con 256 MB de memoria.
  • Tarjeta de sonido compatible con DirectX.
  • Windows XP-Vista.

IMÁGENES

Pulsad sobre ellas para verlas en su tamaño original:

Vista general del escenario del crimen.
Todo empieza así... Un francotirador en una ventana, la comitiva de Kennedy circulando por la calle de abajo.

Apuntando al objetivo.
Naturalmente, nuestro rifle tiene una buena mira telescópica, aunque no es tan fácil acertar al blanco: hay que compensar la distancia y el movimiento del coche.

Informe balístico.
El informe balístico explica que Kennedy ha muerto del mismo modo que en su vida real... Como veis el juego es muy gráfico y no escatima detalles macabros.

Repetición de la escena.
Después de cada escena podéis contemplar repetida la acción desde distintos puntos de vista. En la imagen se aprecia el instante preciso en que el presidente norteamericano pasa a mejor vida al recibir un disparo en la cabeza.

DESCARGA

Y de aquí podéis descargar JFK Reloaded; el juego pesa unos 20 MB. Primero, la copia subida para Arcades 3D:

Y a continuación, otras páginas gratuitas que también lo ofrecen:

ENLACES


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