Nerves of Steel

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De los creadores del legendario The Fortress of Dr. Radiaki llega..., ¡Nerves of Steel! No os riáis, que es cierto; este juego existe. De hecho, en su día, en alguna revista publicaron la primicia como si se tratase de un gran acontecimiento. Cito de un artículo que tengo aquí a mano, y que no recuerdo de qué rincón de Internet ha salido; esto se escribió en 1994, aunque el juego probablemente se publicó a principios de 1995:

«Merit Studios, publishers of a bold new generation of multimedia games like The Fortress of Dr. Radiaki, Harvester, CyberJudas and Fighter Wing, today announced the November release of its new psycho-killer thriller, Nerves of Steel.

[...]

Your violent mission to outwit the enemy and save humanity is played out amidst stunning Doom-style 3D scenery and floors, ceilings and stairs with true up-and-down motion».

Así que ese titulillo ridículo e insensato llamado The Fortress of Dr. Radiaki formaba parte de una "audaz nueva generación de juegos multimedia"..., interesante. Aunque no voy a negar que hacía falta audacia para atreverse a publicar un arcade como ése.

El segundo párrafo que he citado comenta que Nerves of Steel cuenta con un "pasmoso escenario en tres dimensiones del estilo de Doom". ¿Pasmoso? Ya lo creo. ¿Al estilo de Doom? Y una mierda. Entre otras cosas, Doom no mostraba fallos gráficos recurrentes; tampoco empleaba unas texturas que podrían haber sido diseñadas por el mismísimo Homer Simpson; y, por supuesto, contaba con unos niveles divertidos de explorar, y no con los engendros indescriptibles que encontramos aquí, y que ni siquiera sé qué pretenden representar. Qué se le va a hacer, Nerves of Steel es realmente horrible.

Aunque quizás lo estoy describiendo con demasiada dureza. En comparación con The Fortress of Dr. Radiaki al menos resulta jugable. Quiero decir, el motor gráfico, pese a sus fallos y sus insuficiencias, posee un funcionamiento ágil y fluido. Y, siguiendo con este intento de mencionar detalles positivos, diré que los enemigos muestran un acabado aceptable y son más o menos creíbles; mediocres y poco inspirados, ciertamente, pero tampoco voy a negar que tienen un aspecto mínimamente cuidado. De todas formas, la mejor baza de Nerves of Steel reside, en mi opinión, en la música, a ratos bastante atmosférica.

Reconozco que no he visto el juego entero. Normalmente, antes de comentar aquí algún arcade, procuro haberlo jugado antes hasta el final, o al menos hasta cerca del final. Pero con Nerves of Steel, al igual que me sucedió con otros monstruos como Island Peril o Josephine: Portrait of an Assassin, no ha habido manera; nunca pude dejar de sentir que se trataba de una pérdida de tiempo absurda. El juego es tan malo que Pinochet hubiera estado encantado de usarlo en sus salas de tortura.

Y la guinda del pastel son las "puertas holográficas". Sí, holográficas. Estas "puertas" consisten ni más ni menos en paredes o secciones de pared que se pueden atravesar, así sin más. Y lo gracioso es que no se trata de un detallito aislado, sino que se han usado de forma extensiva a lo largo de todos los niveles del juego. Exacto, en la base del malo malvado Kim Dung Moon la mayoría de las puertas son holográficas, a veces indistinguibles del resto de la pared a no ser que consultéis el mapa. No sé qué clase de droga empujó a los autores a pensar que ésta era una buena idea, pero espero no probarla nunca. Mi sospecha es que se inventaron esto de las "puertas holográficas" en un intento burdo de justificar las limitaciones de su motor gráfico a la hora de mostrar puertas realistas...

REQUISITOS DEL SISTEMA

• Procesador 486 o superior (recomendable, al menos, un 486 a 66 MHz).
• 2 MB de memoria RAM (recomendables 8 MB).
• 15 MB libres en el disco duro.
• Tarjeta gráfica VGA - SVGA.
• MS-DOS / Windows 95-98. Con otros sistemas debe correr emulado (DOSBox, etc).